Amanda Bynes habla sin tapujos de su demencia producto de las drogas

La actriz ya mejorada protagonizó la portada de Paper Magazine.

Amanda Bynes se dejó ver completamente sobria y abierta a tocar sin tapujos sus adicciones.

La estrella de Nickelodeon es la nueva portada de Paper Magazine, donde se deja ver adula y sana.

Ya son cuatro años de sobriedad y Amanda habla de cómo llegó a ella la droga y con ello las alucinaciones.

Bynes confiesa que no estaba a gusto con su aspecto tras verse en el cine, lo que ocurrió luego de rodar She's the Man, en 2006 donde interpretó a un niño.

Luego quiso adelgazar y para ello acudió a un medicamento del que se había enterado que tenía el efecto de inapetencia como colateral. Se trata de un remedio para la hiperactividad llamado Adderall y ella acudió al psiquiatra para obtener una receta, fingiendo tener esta condición.

Con el paso del tiempo Bynes se convirtió en adicta al Adderall y recuerda estat en el set masticando demasiadas pastillas, ida, sin recordar sus textos.

"Cuando estaba haciendo Hall Pass, recuerdo que estaba en el trailer y solía masticar las tabletas de Adderall porque pensé que 'me elevaban'. Recuerdo que masticaba un montón que, literalmente, andaba despistada y no podía concentrarme en mis líneas", recordó.

De hecho agregó que tras verse gorda en el monitor decidió abandonar las grabaciones para siempre. Se fue y no volvió.

Bynes confesó que empezó a fumar marihuana a los 16 años, descontenta consigo misma.. "No sé si fue una psicosis inducida por las drogas o qué, pero afectó mi cerebro de una manera diferente a la de otras personas. Cambió mi percepción de las cosas de manera absoluta", expresó.

Luego vino su renuncia de la industria a través de Twitter. "Yo era joven y estúpida", señaló arrepentida sobre ese mensaje y la ola de textos que vino después en la red social, muchos sin sentido.

En medio de esto, Bynes probó otras drogas como la cocaína y el éxtasis, pero no le gustaron. Tamposo el alcohol. "Me metí realmente en el uso de drogas... Se convirtió en un mundo muy oscuro y triste para mí", dijo.

"Todo lo que había trabajado durante toda mi vida lo arruiné todo a través de Twitter...", reflexionó.

"Mi consejo para cualquier persona que esté luchando contra el abuso de sustancias sería tener mucho cuidado, ya que las drogas pueden apoderarse de su vida. Todo el mundo es diferente, obviamente, pero para mí, la mezcla de marihuana y cualquier otra droga, y en ocasiones, beber, realmente arruinó mi cerebro. Realmente me convertí en una persona completamente diferente. De hecho, soy una buena persona. Nunca sentiría, diría o haría ninguna de las cosas que hice y dije a las personas que lastimé en Twitter", fueron sus palabras.