Aprende a aplicarte el rubor sin quedar como "Heidi"

Margarita Larraín nos enseña cómo quedar bellas y saludables sin que parezca que acabamos de terminar de correr una maratón.

Creo que todas alguna vez hemos sido víctimas del efecto “Heidi”, cuando queremos ponerle un poco de salud y color a nuestra cara, frescura a nuestro maquillaje para vernos radiantes y nos aplicamos el rubor de manera que parece que acabamos de terminar de correr una maratón.

El rubor es uno de mis productos favoritos en el maquillaje, pero en general, me he dado cuenta de que a la mayoría de la gente le cuesta un poco saber cómo y dónde aplicarlo, elegir el tono y la cantidad adecuada y lograr el efecto que quieren por lo que muchas veces optan por no aplicarlo.

En esta oportunidad les voy a dar varios tips para que puedan usar este producto de manera correcra y acorde también a la forma de cara de cada una para que puedan sacarse el máximo partido y verse increíble.

En lo personal, amo los rubores en crema, ya que le dan un look más fresco a nuestro rostro, se funden mejor con la piel y tienen una excelente duración. De todas formas, después lo sello con rubor en polvo y si tu piel es demasiado grasosa, te recomiendo utilizar rubor sólo en polvo.

Lo primero es la elección del tono del rubor, lo cual es esencial para que nuestro maquillaje se vea más natural y lograr el resultado deseado. Lo primero es elegir un rubor según tu tono de piel y según la ocasión, ya que no es lo mismo un maquillaje para el día que para la noche.  Si no tenemos en consideración tu tono de piel, te puede pasar que el contraste sea demasiado y se vea un maquillaje muy poco natural o bien que el rubor se pierda en tu rostro y que no logremos el efecto que buscamos con este producto.

Si tu piel es muy clara, debes buscar un tono suave para que no se vea artificial, el rosado clarito, el coral clarito ó el durazno son una excelente elección para ti. Las pieles medias, en cambio, deben elegir un rosado no tan pálido, un rubor malva o un durazno oscuro. Finalmente aquellas que tengan la piel más oscura, se verán increíble con un fucsia, café o naranja mandarina “tangerine”.

Algunos tips importantes para comprar tu rubor es que intentes verlo con luz de día natural para apreciar mejor el color real de éste, pues muchas veces se distoriciona con las luces de las tiendas, que lo pruebes antes de comprarlo, ya que al aplicarlo puede verse muy diferente el color del blush y que utilices un pincel adecuado para aplicártelo, que generalmente no es el mismo que viene con el producto. Uno de los que siempre funciona bien y que facilita su aplicación es el pincel de pelo suelto, biselado, es decir con un cote diagonal, no muy grande para poder aplicarlo sólo en la zona deseada e idealmente de pelo natural.

Algo que está muy de moda y que es tendencia esta temporada es que el tono del rubor, el labial y los ojos sea similar, por lo que puedes probar con eso también, lo que sin duda te hará causar sensación.

Para saber dónde aplicar el rubor, el consejo clásico es que sonrías y donde se forman las “manzanitas” se aplica el color y se difumina hacia atrás, pero es muy importante tener en consideración la forma de tu rostro para poder resaltarlo de la mejor manera.

Si tu rostro es redondo, la idea es lograr que se vea más alargado y fino, por lo que la forma correcta de aplicarlo es en líneas diagonales debajo del pómulo prolongándolo hacia la mandíbula. Evita aplicar rubor en las manzanitas.

Para los rostros alargados o muy delgados debes aplicarlo de manera horizontal desde el centro de la mejilla, a la altura de las aletas de la nariz y difumínalo de manera ascendente hacia la sienes.

Si tu rostro es cuadrado en cambio, aplica el color en las manzanitas para suvizar las líneas angulares de la mándibula y difumínalo hacia la boca para adelgazar el rostro.

En los rostros triangulares también debes aplicar el rubor en las “manzanitas” de las mejillas para disimular la forma geométrica de este tipo de rostro.

Finalmente, si tu rostro es ovalado, aplica el colorete desde la parte alta del pómulo y evita que éste pase muy cerca de los ojos o la nariz. Una forma de entender como aplicarlo en este caso, es hacerlo como “abrazando” el hueso del pómulo en dirección a la nariz.

Con estos tips podrás elegir y aplicar correctamente tu rubor para poder lograr un efecto saludable y fresco en tu maquillae, además de resaltar las formas de tu rostro adecuadamente ¡Ponlo a prueba y nota la diferencia!