Así es la nueva vida de Gisela Molinero en Calama
- Por: Eduardo Aguilera
La ex actriz está casada hace 8 años con el ex futbolista Patricio Galaz, nuevo director deportivo de Cobreloa.
Dejó las luces y se enfocó absolutamente en su familia. Gisela Molinero habló este viernes sobre su nueva vida en Calama. En conversación con el diario “Las últimas noticias”, la rubia entregó detalles de su presente, marcado por sus días instalada en el norte de Chile hace tres semanas atrás.
La ex figura de programas como “Morandé con Compañía” y “Teatro en Chilevisión” está casada hace 8 años con el ex futbolista Patricio Galaz, quien recientemente fue fichado como director deportivo del club Cobreloa. “Estoy feliz acá en Calama”, contó la ex actriz, quien relató que “en diciembre estábamos tomando un mate en Buenos Aires, porque vivíamos allá. De repente me dice: ‘Gorda, firmé por Cobreloa'”.
“Había muerto su padre hacía poco, de quien se pudo despedir, y cuando me dijo lo vi muy contento. Aparte, yo sé que venía sufriendo por Cobreloa y estudió mucho como DT y estuvo viajando por clubes para perfeccionarse”, explicó Gisela Molinero, quien indicó que “no estamos acá por una cuestión económica. Tenemos nuestros negocios inmobiliarios en Argentina, aquí en Calama y en Santiago”.
Sobre su situación, Gisela aseguró que está contenta. “El Pato es buen amigo, buen padre de perros, tenemos dos, perdimos un hijo (en gestación). Me acompaña en mis tratamientos de fertilidad, es buen hijo, cuñado, yerno, es noble, correcto. Lo amo. Entre nosotros hay muchos años de confianza y compañerismo, es una relación preciosa, es lo que soñé”, se sinceró.
“Nos conocemos hace 14 años, terminamos y cuando volvimos me di cuenta de que el amor es cuando das la vida por otra persona, es otro nivel, conoces más el alma. Daría la vida por el Pato”, aseguró la ex modelo, quien dejó de lado su período dedicada a la farándula porque vivió un cambio profundo.
La transformación de Gisela Molinero
Esta ex figura televisiva reveló que “los últimos años estuve en varios procesos, incluida la pérdida del bebé de tres meses. Estuve en terapias, reflexiones y encontré el equilibrio. Antes trabajaba en el espectáculo, hacía cosas mecánicamente”. Por lo mismo, reconoció que “hoy hago lo que quiero”.
“Fui madurando mucho y a veces me voy en volada y agradezco a Dios, al universo, a todo, por detalles como dormir en una cama caliente o sentir el olor a comida que cocino…Antes no paraba, pasaba viajando. Cuando venía a Calama, hacíamos funciones con 15 grados bajo cero, muertas de frío y las carpas se volaban. Fue una etapa bonita, pero ya no la quiero más. Ahora quiero estar con mi pijamita de polar, con mi Pato y viendo Netflix”, afirmó Gisela Molinero, quien recalcó que lo que la hace vibrar ahora es su familia.