“Jamás volvería”: el duro pasado de Carolina Ramírez, protagonista de La Reina del Flow
- Por: Ursula Ures
La actriz colombiana reveló cuáles fueron los principales dolores de su vida y por qué considera que la danza la salvó.
La actriz colombiana Carolina Ramírez Quintero brilla en las plataformas de streaming, tanto en nuevas producciones como en los culebrones clásicos que se reestrenan en Amazon o Netflix. La cara de “La reina del Flow” celebra el buen momento laboral pero sabe que no toda su vida fue tan positiva, y así lo contó, durante su gira por Argentina.
En una entrevista concedida al programa PH, Podemos Hablar, Ramírez relató el lado oscuro de su pasado y cómo sus experiencias de juventud la llevaron a la mujer que es ahora. Una de las preguntas del conductor, Andy Kusnetzoff, giraba alrededor de quiénes sentían que la infancia que tuvieron había marcado su personalidad. Y ese fue el punto de partida para que la actriz relatara parte de su vida, entre la bulimia y la anorexia.
"A los ocho años sale una convocatoria en Cali, de donde yo soy, para una escuela de ballet. Entonces paso esa escuela y mi formación como bailarina clásica arranca a los ocho años. Eso me estructura de tal manera por la que obviamente me obsesiono por ser un tipo de bailarina que físicamente no iba a poder ser nunca. O sea... tenía que volver a nacer", explicó Carolina sobre las exigencias físicas a las que se sometió.
"Eso me trajo ciertos problemas. A los 14, 15 años tenía bulimia y anorexia. Pasé por ese oscuro lugar", siguió la artista, que encarna a la cantante Yeimy Montoya.
"La adolescencia es durísima”, reflexionó Carolina Ramírez. “Si a mí me dicen de volver a un lugar de nuevo, definitivamente a la adolescencia no. Arrastras una exigencia tan grande que atenta contra vos mismo...", opinó. Según contó la mujer, todo cambió al comenzar a actuar. "Y un día aparece la actuación que, finalmente, es lo que me salva la vida", indicó Ramírez.
Pero tanto dolor dejó algo positivo. "La Reina del Flow', por ejemplo, es una cantante... yo no canto nada, canto horrible..., pero puedo hacer de una cantante, pararme en un escenario y hacer un montón de cosas que definitivamente me las dio la danza y me las dio mi infancia", resumió la artista.