Ángela Duarte sorprende al mostrar sus particulares manos
La ex chica reality, dedicada actualmente a la enfermería, llamó la atención al dar cuenta de su hiperlaxitud.
No pasó desapercibida. Ángela Duarte sorprendió este miércoles al mostrar sus particulares manos. A través del formato de stories de su cuenta oficial de Instagram (@angeconnie), donde tiene 555 mil seguidores, la ex figura televisiva compartió unas imágenes que captaron la atención de quienes la siguen.
La joven, actualmente dedicada a la enfermería, enseñó fotografías de ella luego de su turno laboral que se extendió por 24 horas. En primera instancia, publicó una selfie en el ascensor, dando cuenta de su look posterior a su jornada de trabajo, indicando que se lesionó uno de sus dedos.
Posteriormente, Ángela Duarte mostró en detalle la mano que resultó afectada durante el ejercicio de su labor. “Solía tener manos muy lindas”, indicó la ex participante del reality show “Doble Tentación”, el cual le dio la fama hace varios años atrás, llegando a convertirse en influencer.
Ángela dio cuenta de lo que puede a llegar hacer con sus manos por su hiperlaxitud. “Siguen siendo chuecas eso sí”, expresó. Ante los mensajes que recibió por interno debido a las instantáneas, aclaró lo sucedido. “Soy un flan. Dejen de impactarse si les he dicho como mil veces que soy hiperlaxa”, indicó al mostrarse en una tina.
La confesión de Ángela Duarte
Esta influencer se transformó en todo un fenómeno de las redes sociales luego de su paso por el exitoso encierro televisivo emitido por Mega. Si bien en este espacio la joven se caracterizó por ser más bien de bajo perfil, en su plataforma digital es todo lo contrario. La enfermera es un libro abierto con sus seguidores.
Por ejemplo, en septiembre del año pasado, Ángela Duarte compartió una foto que impactó a sus seguidores, ya que se deja ver en sus años escolares, cuando pesaba 88 kilos. Junto a la publicación escribió un potente mensaje de amor propio. “Siempre fui extrovertida, pero mi autoestima estaba en el suelo, nunca tuve pololo, ni fui a fiestas, solía aislarme y me enclaustré mucho en una religión, refugiándome ahí́ desde los 12 hasta los 19 años”, reveló.
“Así como existen personas que toman alcohol y se drogan, mi gran obsesión era la comida. Todos mis problemas los calmaba comiendo y de seguro muchas me entenderán a lo que me refiero. Esporádicamente sufría acné́ severo en rostro, pecho y espalda, además del gran sobrepeso que tenía. No me gustaban las fotos y menos mostrarme socialmente”, detalló.
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