Jorge Olivares, ex "Protagonistas de la fama", terminó su matrimonio de dos años
Debido a diferencias durante la cuarentena, el artista junto a su pareja optaron por el divorcio.
Recordado es Jorge Olivares, ex participante del primer reality transmitido en nuestro país, "Protagonistas de la fama", donde se hizo conocido tras su participación.
El año 2014 dejó nuestro país para irse a vivir a Estados Unidos con el sueño de ser un "trabajador independiente". Allá formó su propia empresa de pinturas, "Patagonia Painting", y además el año 2018 contrajo matrimonio, en una romántica ceremonia arriba de un barco.
A pesar de eso, su matrimonio llegó a su fin y según lo que explicó en conversación con LUN fue por las diferencias que afloraron durante la cuarentena. "Pensé que iba a durar toda la vida; uno se casa pensando eso", declaró.
"Había diferencias en la toma de decisiones de la economía familiar: ella es mucho más conservadora y yo más silvestre y arrojado en ese tipo de decisiones... ese año tuve una mala racha, porque me asocié con una empresa más grande de construcción y perdí todo lo que había construido con Patagonia Painting", agregó.
"Ella tenía mucho miedo de que no resultara, entonces uno espera que su esposa o pareja se sienta segura de las decisiones que uno toma. Sentí que ella estaba más preocupada de no correr riesgos económicos y, finalmente, cuando uno tiene una empresa tiene que hacer gastos y apostar a que resulten ciertas inversiones. Y resultaron", explicó.
Los intentos por salvar su matrimonio
Jorge Olivares reveló que antes de su divorcio, fueron a terapia junto a su pareja por cinco meses, sin embargo, esto no resultó ya que siempre terminaban hablando de dinero.
"Al final, ella se hubiera sentido más segura si yo hubiese sido empleado de alguien", reveló.
Sobre el divorcio aseguró que "fue muy expedito, porque lo hicimos sin rollo, de forma súper madura. Nada de escándalos. Los dos muy de acuerdo. Las pocas cosas que teníamos se las dejé a ella y yo me fui con mi ropa nada más. Seguimos viéndonos para que nuestros perros jueguen. Y coincidimos en que ahora estamos más felices cada uno por su lado".
"Me arrendé una casa y tengo mi perro Ónix, un pastor alemán que me acompaña a todos lados y que es mi soporte emocional", finalizó.
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