Miguel Bosé afirma que su voz se dañó por quiebre sentimental
El cantante dio su primera entrevista en años, revelando aspectos desconocidos sobre su vida personal.
Abrió su corazón por completo. Miguel Bosé afirmó que su voz se deterioró por duro quiebre sentimental. En conversación con el periodista Jordi Évole, el intérprete de temas como “Morena mía” y “Amante bandido” desclasificó diferentes aspectos sobre su vida que se desconocían hasta ahora.
El cantante se refirió a su relación con las drogas, confesando que su primer contacto con ellas fue “por un desamor”. El artista reconoció que “esa noche me tomé mi primera copa, me metí mi primera raya que me duró una semana; me salió baratísimo”. Sin embargo, su gusto por esas sustancias fue en aumento.
Miguel Bosé indicó que alcanzó a consumir hasta 2 gramos de cocaína al día. A esto se sumaban “maría” y el éxtasis. Sin embargo, todo eso lo dejó hace siete años atrás de un momento a otro. “Las fuerzas que a uno le hacen tomar estas decisiones tan radicales solo vienen de dentro”, expresó respecto a su cambio repentino.
El intérprete también tuvo palabras para el deceso de su madre, Lucía Bosé, quien falleció en marzo del año pasado a los 89 años de edad. “A mi madre se la sedó hasta la muerte, como se solía hacer con el resto de los ancianos, daba igual quién fuera. No te la dejaban sacar, no podías ir a visitarla”, dijo, aclarando que no fue por Covid 19.
“Mi madre no tenía coronavirus. Mi madre no se murió de Covid y eso tiene que parar ya”, afirmó el también actor, quien no quiso entrar en detalles sobre las causas de su partida. “No quiero hablar aquí porque sería interminable y sacaría cosas tremendamente peligrosas para las personas que se ocuparon de mi madre”, aseveró.
Miguel Bosé, afectado por el amor
El diálogo con Évole también dio espacio para hablar sobre el evidente deterioro en la voz del popular cantante, quien argumentó que se debe a un problema emocional generado por el quiebre con el escultor Nacho Palau, con quien tuvo una relación sentimental que se extendió por dos décadas.
“Cuando mi relación de pareja empezó a ir mal, cuando el amor no existe, cuando el enamoramiento ha desaparecido, cuando la amistad y el buen rollo se difumina, y cuando se pierde la admiración por la persona con la que estás, cuando todo se derrumba…En mi caso, por discreción, por responsabilidad, por educación también, aguantas. Y cuando aguantas, todo eso se envenena y cuando estalla, estalla mal y empiezan los problemas serios”, explicó Miguel Bosé, quien recalcó que “el primer problema gordo que yo tuve fue la voz. Ahora puedo hablar, pero he llegado a no tener voz, cero".
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