Nicole Block reapareció tras separación y rehabilitación por trastornos alimenticios
La actriz se trató en Estados Unidos y ahora está de vuelta en Chile.
Desde agosto del año pasado, las redes sociales de Nicole Block estaban en silencio. La actriz – que solía ser muy activa en Instagram – desapareció, y dejó de mostrar la vida que llevaba en California desde 2018.
Este fin de semana, Nicole reapareció en la portada del diario Las Últimas Noticias, contando su verdad. La actriz estuvo internada en un centro médico en California para tratar la anorexia y bulimia que la aquejaban. “Llegué a un punto en que si ya no me trataba me podía morir”, confesó.
Nicole estuvo cuatro meses internada por su propia voluntad en un centro especializado en desórdenes alimenticios llamado Rosewood, ubicado en Santa Monica. Regresó hace poco a Chile, separada de su marido, y considera que ahora está en el momento “más feliz de su vida”, ya que luchó siempre contra estos problemas.
“Mi mamá no me enviaba comida —ni colación o almuerzo- al colegio. Cuando llegaba a la casa comía tanto, que después me dolía el estómago. Así comenzaron los atracones, porque pasaba mucho sola y no sabía nada de porciones”, contó sobre su infancia.
Luego en la adolescencia continuaron los problemas. “Me despertaba a las 5 de la mañana, antes de ir al colegio, para hacer bicicleta. Durante el día me comía sólo una naranja y después, junto a mis papás, alguna otra cosa”.
“Fui muy gordita y después muy flaca. Pasé de gordita, a flaca, de gordita a flaca, de gordita a flaca. En mi clóset tenía ropa de diferentes tallas: 42, 40, 38, 36, 34", explicó sobre las constantes variaciones, que ella cree, se debían a otras carencias. “Quería que me trataran mejor y creo que en mi mente pensaba que si me veían débil quizás eso ocurriría. La comida es un confort. En el fondo es el amor que no tienes en otras áreas”, explicó Nicole, que en sus peores momentos llegó a pesar 40 kilos.
“Estaba tan flaca que no encontraba calzones, compraba de niñita chica porque la talla S era muy grande para mí”, confiesa. Esto fue cuando era parte del elenco de “Tranquilo Papá” en Mega, donde asegura que muchos le comentaron el tema, pero no profundamente, con la excepción de una productora que le ofreció ayuda.
De la anorexia, la actriz pasó a la bulimia, llegando al punto de vomitar 20 veces al día. “Es invisible. La gente te ve comer, pero alguien con bulimia puede vomitar hasta parada sin que nadie se dé cuenta. En reuniones sociales, la gente te dice oye, comís caleta. Y uno responde cosas como es genético , pero es mentira: estás vomitando lo que comes”, cuenta.
La actriz confiesa además que se separó de su marido, Juan Cristóbal Meza, 29 años mayor que ella. “Cambié gracias a la terapia. Soy otra persona. Pasé de ser una persona enferma a una sana. Me di cuenta de que nuestros intereses no eran los mismos y que efectivamente teníamos mucha diferencia de edad. También diferentes energías. Me di cuenta de que la relación no funcionaba y nos separamos. Quizás estaba buscando al papá que nunca tuve. Una se siente protegida y piensa acá me quedo”, contó.