Quién es Alesenka Lesenka, la bailarina rusa que conquistó a Raúl Peralta
El bailarín chileno parece haber encontrado el amor.
En abril de este 2024 Lisandra Silva y Raúl Peralta pusieron fin a su relación de 5 años con una emotiva publicación en redes sociales.
“Queríamos compartir con ustedes que ya hace casi 6 meses atrás decidimos mutuamente ponerle fin a nuestra relación sentimental de 5 años”, escribió entonces la modelo cubana en su cuenta de Instagram.
En esa oportunidad, destacó lo que fueron estos años juntos y los dos hijos en común “nuestras 2 más grandes bendiciones, Noah Leiah. Nuestros maravillosos hijos que nos tendrán unidos como familia para toda la vida. Si bien es una noticia asimilada para nuestras familias y amigos, queríamos comunicárselo a todo aquel que siguió nuestra historia desde el inicio y siempre nos regaló tanto amor”.
Alesenka Lesenka, la bailarina rusa que le robó el corazón a Raúl Peralta
Tras varios meses desde que hizo público el quiebre de la famosa pareja, Raúl Peralta parece estar dándose una nueva oportunidad en el amor ¿con quién?
Se trata de una bailarina de origen ruso cuyo nombre es Alesenka Lesenka, de 31 años de edad, con la que ha posado en reiteradas ocasiones en la web, incluso, recientemente estuvieron de vacaciones en Egipto.
En cuanto a sus redes, en IG (@alesenka.lesenka), la joven posee 735 mil seguidores, y su contenido suele estar relacionado con el baile, además de tiernos registros junto a su pequeño bebé.
Por otro lado, Alesenka Lesenka alcanzó la fama en su país luego de mantener un noviazgo con el futbolista caboverdiano José Luis Mendes Andrade, apodado “Ze Luis”, cuando este jugó en el Lokomotiv Moscú, equipo de la primera división rusa.
Pero si creías que era todo, la nueva conquista de Raúl Peralta, al igual que el chileno, posee una academia de danza llamada Kvartal, ubicada en Moscú.
Es importante destacar que hasta la fecha, Raúl sigue sin oficializar el romance con su par de profesión, no obstante, cada día que pasa, pocas dudas quedan de que su corazón ya encontró dueña.
